Es esa época del año otra vez: miramos las historias principales de los últimos 12 meses y nos preguntamos qué se destacó, qué recordaremos dentro de una década, qué hemos olvidado ya y qué significa todo esto. Desafortunadamente, este último año ha hecho que cada lista de “hechos principales” sea bastante corta por una razón: la pandemia del COVID-19.
Pero en medio del último año oscuro, traumático y estremecedor, hubo también verdaderos momentos de optimismo, especialmente cuando se trata del cannabis. Echamos un vistazo al peor año de todos, y encontramos nuestros cinco mejores momentos para la marihuana en EEUU.
1. El cannabis se convierte en un servicio esencial durante la pandemia
Este fue un año en el que los memes nos ayudaron a mantenernos (mayormente) cuerdos. Asimismo, varios memes de cannabis se destacaron de la multitud: “quién hubiera pensado que un día estaríamos fumando marihuana en una reunión familiar, y la reunión familiar sería la parte ilegal”.
En marzo, cuando las órdenes de cuarentena entraron en vigor en todos los Estados Unidos, la marihuana alcanzó instantáneamente un nuevo estatus: servicio esencial. En todos los estados con un programa de cannabis legal, medicinal o recreativo, los gobernadores y líderes municipales dictaminaron que los dispensarios de cannabis eran un servicio de atención médica esencial, muy parecido a las farmacias y clínicas.
De la noche a la mañana, los dispensarios implementaron pautas de distanciamiento social y pasaron a ofrecer servicios de pick-up, así como de delivery, donde era legal. Las exigencias de seguridad también hicieron que varias jurisdicciones aprobaran medidas temporales que permitían el delivery de marihuana, fomentando la esperanza de que las nuevas directrices pudieran llegar a ser permanentes.
La pandemia también fue testigo del aumento del trabajo y la escolarización a distancia. Es así que innumerables personas se apoyaron en ella como una forma de hacer frente a la ansiedad, el miedo y la sensación de encierro.
¿Seguirá siendo el cannabis “esencial” después de que salgamos de la pandemia? Es difícil decirlo, pero está claro que la marihuana ha establecido un lugar en la sociedad norteamericana que no existía en el 2019.
Los pacientes y defensores del cannabis medicinal han expresado su esperanza de que estos cambios se traduzcan en un mayor acceso para los pacientes, incluso después de que se levanten los cierres.
2. Cinco estados de EEUU aprueban medidas de legalización
Ya sea que tu candidato haya ganado o perdido, la legalización del cannabis fue una rotunda ganadora el día de las elecciones.
Los votantes de cuatro estados –Nueva Jersey, Arizona, Montana y Dakota del Sur– aprobaron medidas que legalizaron tanto el cannabis medicinal como el recreativo. Asimismo, un 74% de los votantes de Mississippi aprobaron una medida para legalizar la marihuana medicinal y establecer un sistema estatal para la concesión de licencias a los dispensarios.
Todo esto sin mencionar que tres de estos cinco estados están entre los más rojos y conservadores del país. Se puede decir que los resultados envían el mensaje: Si Mississippi aprueba la legalización de la marihuana medicinal, ¿por qué no lo pueden hacer todos los demás? Si Dakota del Sur puede legalizar el cannabis para uso recreativo, ¿entonces por qué el retraso? (Los estamos mirando, Texas, Minnesota, Iowa, Wisconsin… la lista continúa).
La votación es una indicación más del impulso que se ha dado a la legalización de la marihuana, que ahora cuenta con el apoyo de más estadounidenses que nunca, según una encuesta de Gallup publicada a finales del 2020.
3. Más investigaciones sobre cannabis en el 2020 que en cualquier otro año de la historia
Rara vez pasó una semana en el 2020 en la que no hubo titulares sobre publicaciones de algún nuevo estudio sobre cannabis.
De hecho, según los datos recopilados por la Biblioteca Nacional de Medicina y PubMed.gov, se publicaron unos 3.595 estudios sobre la marihuana en el último año. Esto representa más del 10% de todos los estudios relacionados con cannabis en la base de datos de los últimos 60 años.
Las investigaciones publicadas en el 2020 abarcan desde la eficacia del cannabis en el tratamiento de diversas enfermedades, el consumo prenatal de cannabis, el consumo de marihuana en la adolescencia, la forma en que la legalización afecta a las tasas de consumo de cannabis y mucho, mucho más. De hecho, en sólo dos semanas desde que NORML celebró el número récord de estudios publicados en el 2020, se publicaron casi 70 nuevos estudios.
El aumento de las investigaciones sobre cannabis puede vincularse a una serie de novedades de los últimos años, en particular la difusión de la legalización del cannabis y la mayor aceptación general del consumo.
4. Las protestas ponen de relieve al cannabis y la justicia penal
El último verano, un policía de Minneapolis se arrodilló en el cuello de George Floyd, un hombre negro desarmado de Houston, durante más de 8 minutos, matando a Floyd a plena luz del día mientras un teléfono móvil lo grababa todo. La grabación se hizo global, provocando el mayor disturbio social en los Estados Unidos desde el asesinato de Martin Luther King, Jr. en 1968.
Las protestas y los disturbios se extendieron a prácticamente todas las áreas metropolitanas de los Estados Unidos, y tampoco faltaron en los pueblos pequeños y las localidades rurales, lo que desencadenó un debate nacional sobre el racismo, la brutalidad policial, la desigualdad y la reforma de la justicia penal.
Para muchos activistas, manifestantes y simples observadores simpatizantes, la posible reparación de la devastación que la guerra contra las drogas causó en las comunidades negras y morenas es un componente central del cambio que debe efectuarse en los Estados Unidos.
Esto puso la atención en la industria del cannabis, donde tan sólo el 17% de los ejecutivos son minorías y sólo el 1% de los propietarios de tiendas de dispensarios son negros, según un análisis realizado en el 2016. Esto sin mencionar que los negros y morenos han sido durante décadas desproporcionadamente arrestados por delitos de marihuana.
Este renovado enfoque en la guerra contra las drogas, la reforma de la justicia penal y la necesidad de una mayor diversidad en la industria del cannabis podría significar que en el 2021 veamos más legislación y activismo dedicados a asegurar que la ganancia que traiga la legalización del cannabis no pase por alto a las mismas comunidades que pagaron el precio más alto por su prohibición.
5. El deporte y el cannabis se convierten en una gran combinación
Una noche extraña del noviembre pasado en Los Ángeles, algo grande sucedió en el ámbito del cannabis. La leyenda del boxeo, podcaster y entrenador de palomas Mike Tyson se enfrentó a su colega Roy Jones Jr. en una pelea de la exhibición patrocinada por WeedMaps.
La invitación a la exhibición incluía una extraña y vergonzosa pelea entre el YouTuber Jake Paul y el ex Knick Nate Robinson de Nueva York, en la que el espíritu de Robinson abandonaba su cuerpo al ser golpeado por Paul, convirtiéndose en un hazmerreír instantáneo.
Pero a lo largo de todo esto, el logo de WeedMaps estaba en primera plana, enviando el mensaje de que si todos nos acostumbramos a los eventos deportivos patrocinados por el alcohol, entonces ¿por qué no la marihuana?
En general, el 2020 vio algunos grandes movimientos en el cannabis y los deportes, especialmente en el básquet. En junio, la NBA anunció que no haría pruebas a los jugadores para detectar marihuana durante la concentración de la NBA en Orlando, Florida. La NBA anunció más tarde que extendería la moratoria de las pruebas de marihuana a la temporada 2020-2021, posiblemente haciéndola una realidad permanente.
Esta era de tolerancia también se extiende al béisbol, donde la Liga Mayor de Béisbol anunció que retiraba a la marihuana de su lista de “drogas de abuso” a finales del 2019.
Realmente, el mundo de los deportes se está calentando con el cannabis, y en el 2020 esta tendencia continuó a lo grande.
Bien, sabemos que dijimos que había cinco, pero aquí hay una sexta.
6. Los estadounidenses gastan casi USD 18 mil millones en cannabis
Si alguna vez hubo un año en el que sólo quisieras acurrucarte en el sofá y fumar porro, ese fue el 2020. Y no es sólo un sentimiento: tenemos las estadísticas que lo respaldan.
De acuerdo con las cifras recopiladas por Leafly, los datos de impuestos e ingresos estatales indican que las ventas nacionales de marihuana para uso médico y de adultos sumaron USD 17,9 mil millones en el 2020, 67% más que los USD 10,7 mil millones en el 2019. En nueve estados -Arkansas, Connecticut, Florida, Illinois, Maine, New Jersey, North Dakota, Ohio y Pennsylvania- las ventas del 2020 fueron el doble que las del 2019, según Leafly.
Esto podría estar relacionado con el pánico que sintieron los pacientes de cannabis y los consumidores ocasionales que se apresuraron a abastecerse antes de que los encerraran pero, según Leafly, este aumento de las compras en abril se mantuvo constante durante el resto del año. Las cifras también indicaban que los clientes habituales también aumentaron la cantidad de cannabis que compraron, con un gasto mensual medio que aumentó del 25 al 40% entre tales consumidores, informó Leafly.
Este aumento también debe vincularse al hecho de que tres estados -Michigan, Maine e Illinois- comenzaron oficialmente la venta legal de cannabis recreacional en el 2020.
Aún es muy pronto para decir lo que traerá el 2021, pero si el año pasado fue una prueba, el cannabis tiene un don para prosperar en tiempos de adversidad y, cualquiera que sea el camino, debes esperar que la marihuana salga adelante.
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